Y AL TERCER DÍA RESUCITÓ DE ENTRE LOS SUEÑOS

Lo hicieron. Eso fue lo único que se me venía a la cabeza.

Mientras los veía gritar, abrazarse, saltar y levantar ese trofeo como sólo había visto hacer a melenudos, d10ses devenidos a entrenadores con una boca desproporcionada, a rapaditos impolutos...sólo eso, "lo hicieron".

Esta vez eran los nuestros. Era ese tipo del que sabemos tanto. Que es de Móstoles, que juega al mus, que besa sin reparos cuando la felicidad es tal que llora desde la portería contraria a donde se marcó el gol que pasará a la historia, antes de que el árbitro pite el final. Ese que vimos pasar de Niño del Atleti a 9 reconocido mundialmente. El asturiano con pinta de kinki que mira para abajo y sin embargo siempre acaba marcando. Aquel otro bajito al que se le saltaron las lágrimas cuando perdió el Torneo de fútbol 7 siendo un niño y que ahora hizo lo mismo pero por haber conseguido la copa del Mundo. Tantos chavales de ventipocos que hace nada estaban en las categorías inferiores de sus equipos y que ahora son capitanes, pulmones, regateadores, arietes y seguros de vida en la defensa y en el centro del campo. Recambios de lujo. Grandes Reservas.

Los hemos visto crecer. Eso es lo que más nos llega. Que son ellos. Que son los nuestros. "Los españolitos". Los mismos que hace dos años nos hicieron ver que nosotros también tenemos derecho a creer, con incorporaciones que nos convencen de que podemos seguir haciéndolo.

Lo hicieron. Y todas aquellas decepciones se fueron. Lo hicieron. Y esa estrella reina encima de nuestro escudo. Lo hicieron. Y ya siempre seremos campeones. Lo hicieron. Jugando. Lo hicieron. Luchando. Lo hicieron. Perdiendo. Lo hicieron. Ganando. Lo hicieron. Permitidme que lo diga, a la "española", sufriendo. Pero ya está. Lo hicieron. Ya era hora. Nos lo merecíamos.

Llevo 3 días viendo vídeos, análisis, leyendo opiniones, impresionándome con imágenes de océanos de gente que los recibe. Sonriendo. Disfrutando. Intentando creérmelo. Y seguiré emocionándome con futuros reportajes, como ya hiciera con la Eurocopa. O poniéndome el gol de Iniesta, o el de Puyol, como tantas veces hice con los penaltis contra Italia. Y seguirá encantándome que subtitulen lo que se dicen los jugadores y el entrenador en los partidos. Porque seguirán saliendo detalles y anécdotas durante mucho tiempo. Y entiendo que a mucha gente le canse. Pero a mÍ no. Me encanta. Porque me encanta el fútbol. Y porque esta vez es la nuestra. La Selección española de fútbol.

La que ha conseguido sacarnos a la calle, unirnos bajo unos colores y una borrachera de felicidad como nunca se había visto. Qué orgullo! Bien por ellos. Como ya les dije antes, gracias.

Ahora toca volver a la rutina porque la vida sigue para todos. Resucitamos de un sueño que fue real. Y lo hacemos como campeones.

Lo vimos. No hace falta decir nada más. Lo hicieron.

España es campeona del mundo.