ENTRE-VISTA Y VISTAZO "NO REMUNERADO"

Hacer una entrevista de trabajo y mentir sobre alguna aptitud.

Hacer una entrevista para ser becaria sin cobrar y mentir sobre tu actitud.

Encuentren las 7 diferencias.

No tengo ganas de trabajar y cumplir, como le dije.
Tengo ganas de aprender y hacer las cosas bien.
No tengo ganas de trabajos de tres meses y con cola para el relevo.
Tengo ganas de que me enseñen y de un trabajo decente.
Es mucho pedir que no me vacilen…
O que lo hagan sólo a cambio de un futuro?

Pues parece que sí…

“Hay que comer mucha mierda”
“Becarios fuimos todos”
Sentirse culpable por no querer la mierda que te ofrecen.
Por volver a quejarte.
O a reírte que es lo que te queda.
Y los gin tonics de sábado, y los botellones, y las drogas, y “es que hay que ver esta juventud sin valores”
…y todo lo demás también.

Pues vale.

Y otra llamada.
Otra entrevista.
Otro puesto no remunerado.
Qué vergüenza.
Qué impotencia.
Ni si quiera soy de esa cifra. La de los 6 millones.
Porque no estoy parada.
Estoy cubriendo un puesto de trabajo a coste 0 para la empresa.
Muy bien todo.

Para de quejarte.
Para de llorar.
Para de pensar.
Y de preocuparte.
Mejor así.
Tú solo sigue.
Por donde te mandan.
Por donde puedas.
Pero sin hacer ruido.
No vayas a molestar.
Así.
Muy bien.
Ves?
No costaba tanto…
Calla y come.
Come mierda.
Y luego?
Shh!
No se aceptan preguntas.
Ya lo dice el Presidente…

Todo es falso.
Menos alguna cosa.
Y qué cosita es?
Que ya no queda moral.
Y que mañana sonará el despertador.
Otra vez.

Sigamos minando la moral de la juventud de este país ya verán qué bien nos va a ir…

 

Publicado originalmente en Cerveza Salada.



 

 

PUNTO ES

Se acabó “Marea roja”, que me tuvo en tensión perpetua con bombas nucleares, hombres sudando la gota gorda y decisiones que se toman creyendo estar en posesión de la verdad, con todas las consecuencias y hasta el final. Como en la vida misma (ja). Tocaba irse a la cama, pero al otro lado del Atlántico un amigo tenía una duda y quería una respuesta. Al filo de la media noche pretendía que yo le diese alguna explicación a lo que estaba pasando en España, que le preguntan por allí y no sabe qué contestar. Bien, pues yo tampoco “mai fren”.

No sé ni cómo llamarlo, ni cómo explicarlo.

Porque no sé ni cuándo empezó, ni de qué color es, ni si alguien o algo puede hacer cambiar el rumbo de esta dinámica circense, casposa, cutre y carente de cualquier tipo de respeto por parte del espectador, que reina en nuestra política.

Lees artículos, tweets y estados de Facebook. Escuchas tertulias y ves las noticias. Y sigues sin dar crédito. Te levantas cada mañana como si fuese el día de la marmota. Aquí no cambia nada. Todos los días son días de jena. “Jena” es un buen amigo que bautizó de esta forma todo aquello que…bueno todo aquello que rezuma penosidad. Ojo, no se confundan que la línea que divide la jena de lo genial es muy fina.

Por desgracia todo lo que huele a España ahora mismo es una jena auténtica. Una pena. Una desgracia. Un mal sueño.

¿Cómo hemos llegado hasta aquí? ¿Y tú me lo preguntas? poesía eres tú.

Y porquería también.

Porque ría ahora, o llore, qué más da, pero no diga que no sabía nada. Que esto olía muy mal y cada uno tiraba con lo suyo. El problema es que ya no hay por dónde tirar…o tal vez todo lo contrario, hay demasiada manta pero está guardada bajo llave en un cajón al fondo del desván del Parlamento, del Senado, de los Ayuntamientos, de las Diputaciones, de los despachos, de las canchas de padel, de las gasolineras de mala muerte, de los sobres de papel y de todos los medios que no gritaron hasta que no hubo EREs de por medio.

Claro que nos quejamos ahora. Yo al menos lo hago porque me parece que me han tocado algo más que la nómina o la moral. Han jugado con mi futuro, que ya está siendo pero no está pasando.

Hice todo lo que estaba en mi mano para continuar con “la herencia recibida” que en mi caso no es una excusa para malas políticas sino un privilegio. Y ahora me quejo porque muchas malas, egoístas y cortoplacistas decisiones que se tomaron durante muchos años antes y después de que yo naciese me están impidiendo encontrar oportunidades.

Yo me quejo, claro, desde mi posición de becario no remunerado cuyo mail es becario1@xxxxxx.es No vaya a ser que se me olvide, no el puesto, sino el país en donde estoy.

Ese .es te delata amiga.
Y .es una buena mierda.
Y punto.

Publicado originalmente en Cerveza Salada




 

 

PRIMADA

Hace poco anotaba a "los primos" como una de esas pequeñas cosas que hacen que la vida valga la pena. Y es que de estos especímenes yo tengo muchos. De uno y otro lado. Con conexiones bizarras y Vigo como punto de encuentro.

Esta vez, en cambio, fue en Madrid, tras una serie de catastróficas desdichas que acaban con una facción de Garcías viniendo a la capital con ganas de jarana. Esto sólo pasa en las mejores familias. Como la mía.

Los días previos a los eventos oficiales tienen un algo prohibido que te empuja a liarte aunque sabes que no deberías, porque hay que guardar fuerzas para el día siguiente. Aquí esto no pasa. Se sale con el cargador del móvil en el bolso y te encomiendas al poder mágico del Neobrufén. Y punto. Y si la noche empieza con un "Cómo os conocisteis" y sigue con el señor Javier Puente narrando historias a propios y extraños, nada puede ir mal. Además, por si acaso, los vasos de copas a precios madriletas van poblando las mesitas de diseño de un local molón con posters enmarcados, situado en una cuesta que bien podría ser Vigo.

Pero aquello parecía la ciudad donde crecí porque vamos "compartiendo ubicación" y reencontrándonos con otros viejos conocidos. A mi primo de Zumosol le increpan con que lleva un jersey muy feo y él tan dialogante como siempre y con mucha noche a sus espaldas, le contesta que ella en cambio va muy guapa y que el jersey en cuestión se lo compro su mujer que con cara de pasmo explica que lo compró por calentito, no por bonito. Andreia, que no cuela, viste al chaval bien coñe, que con la planta que tiene lo tienes fácil.

Y es que en esta familia, además de tener muchos primos en edades parecidas y con mentalidad noctámbula semejante (el gen Pirulí que le dice el señor de gafas oscuras) han tenido bastante buen gusto añadiendo a los postizos, porque el "Que si tú quieres seguir, yo sigo eh?" no salió de la boca de un García precisamente, sino de un ex-tuno y marinero de aguas bravas que navegaba por las calles de Santiago y tiene en su haber anécdotas que sólo le pudieron pasar a él.

Supongo que Dios los cría y ellos se juntan.

Y por fin llegó. El día oficial de la primada derivada de una no boda. Con una petición de disculpas previa a los camareros empezamos una tarde en la que lo de menos era compartir la comida y lo de más compartir horas. Tiempo juntos, con la familia. Con recuerdos a los que no están, explicaciones a las nuevas adquisiciones del orden de llegada, de lo diferente que era todo antes de que los años nos reuniesen y, por supuesto, con mención a la abuela Nené y a la Virgen del Pilar.

Y de sitio a sitio y tiro por que me toca. O por que me copa. Que allí hubo varias. Y pipas y patatillas a modo de cena. Y hasta un Celta penoso que no le quitó un poco de encanto a esas 12 horas de juerga García. Y risas e historietas, y etiquetas y Carmex para los labios...Y la verdad, sé que hubo más, pero no me acuerdo.

Porque un García Shore como este acaba con cualquiera.

De nuevo, bendito Neobrufén.

Espero que llegasen bien a sus respectivos hogares donde les esperan trabajos, niños y vidas serias...que también sabemos hacer eso.

Un placer volver a verles tan bien primos.

Ah! sí que hubo algo más. Unanimidad absoluta: Hay que repetir.