Seguimos con el álbum familiar.
De este día no tengo ningún recuerdo propio, era muy pequeña, pero las fotos me dan una idea.
Aquí, los González García al completo. Santi, ni repeinado y vestido de marinerito puede evitar su cara de no tramo nada bueno. Manu, siempre con el ceño fruncido, serio, impasible y con tupé a lo Tintín. Mi madre con ese pelo y esa camisa con hombreras, muy ochentena ella. Yo con ese vestido que nunca me convenció demasiado...y mi padre sin canas!! meu deus!!!
Creo que mi madre pretendía que hiciese alguna cosa graciosa o por lo menos cambiase esa cara de no sé que hago aquí pero de pequeña nunca fui "esa niña mona" que a ella le hubiese gustado tener. Con tanto niño alrededor...aún ahora se desespera cuando ve que soy incapaz de andar en tacones, cuando voy con los vaqueros rotos, cuando no me pongo otra cosa que tenis...pero la mujer me acepta y de hecho acierta siempre que me compar algo.
Luego está el jefe que no puede evitar que se le caiga un poco la baba con "la niña" Él tan exagerado como siempre, decía que era su nieta cuando salíamos a dar un paseo. Ir de compras con él era como sentirse Pretty Woman. Pero qué queréis, también tengo que aguantar que no quiera que salga hasta los cuarenta, que me diga que mandará a un sicario a matar al primer tío que se me acerque, que me suelte una y otra vez las mismas charlas sobre la vida y que no pueda evitar coger el teléfono cuando se aburre para perguntarme cómo estoy, si me hace falta algo y recordarme que me quiere. Y se aburre mucho. Pero bueno, esto es solo un pequeño adelanto del personaje que tengo por padre.