Porque tu cocido, tu salmón escabechado y tu empanada son insuperables aunque siempre escasos (…)
Porque siempre sabes donde están las cosas o en su defecto siempre las encuentras
Porque te preocupas por todo y por todos (y todo y todos dependemos de ti)
Porque vas de moderna con flequillo
Porque fuiste “la gacela de Riobó”
Porque te ausentas cuando calcetas o cuando juegas al backgammon
Porque aguantas mis lloreras telefónicas
Porque si estás mal, haces por que no se note
Porque cantas mientras conduces
Porque te fuiste a Londres, con tus pisamierdas, en tu etapa hippy y reivindicativa
Porque eres mucho más fuerte de lo que yo seré nunca (y tienes mejor humor)
Porque gracias a ti tengo moto (aunque a este paso me parece que te la quedas )
Porque si te enfadas se hunde la casa
Porque mejoras con los años (como el buen vino)
Porque me haces empanada para traerme a Madrid
Porque estás en todo
Porque siempre estás
Porque eres “la Garci”
Porque aguantas al jefe (bravo!)
Porque con Manu te hacen chiribitas los ojos y cuando viene Santi lloras de emoción…pero yo soy “tu niña”
Porque no sé qué sería de nosotros sin ti
Porque te quiero
Porque te lo estabas mereciendo hace tiempo
Y porque madre no hay más que una
pero como tú, ninguna.